A lo mejor, por las fracturas se fugó todo lo bueno, ya soy un cuerpo vacío (esta frase la estaba pensando en inglés y siento que no transmito en español la imagen que me aparece en la cabeza cuando digo: "I'm an empty carcass". Imagino mi cuerpo tirado en un lugar árido. En las cuencas de mis ojos, ellos no están, se ve un vacío. La boca está abierta y no hay lengua, solo vacío. También son imágenes muy viciadas de dualismo, es un lastre difícil de erradicar. En fin), I'm an empty carcass, toxic waste.
Es difícil pensar en mí como una mala persona, me genera conflicto. Si pienso que soy una buena persona, me siento arrogante. Si pienso que soy una mala persona, siento que soy demasiado dura conmigo misma. Quiero dejar de ver la vida en blanco y negro, me cuesta tanto. Aunque, a ratos, lo logro (hoy no, pero otros días sí).
Otras veces, pienso que el concepto de bondad que yo tengo es erróneo. Yo encuentro cosas buenas y bellas en mí, pero son imperceptibles para los otros y las otras. Entonces, quizás realmente no son buenas. O puede que lo único bueno que quede en mí, de hecho, sea imperceptible para los demás, solo yo lo puedo ver. Tal vez es cuestión de aprender a comunicarlo. Tal vez no.
Llevo casi dos años intentando juntar las piezas, pero solo las rompo más. Son como trozos de una porcelana o una cerámica muy delicada, se necesita una experta que sepa restaurarlas. Definitivamente, yo no lo soy. Ha habido veces en las que he creído que estaba lográndolo, sin embargo, parece que solo me he roto más. Además, son pedazos muy filosos, por tanto, la tarea de reparar irremediablemente hiere a quienes lo intentan. En ocasiones pienso que esto no tiene arreglo, que solamente me seguiré desintegrando hasta volverme polvo y así, el viento me arrastrará y cesaré de existir.
Yo tenía en mente repararme como con esa técnica japonesa llamada kintsukuroi. En esta, se usa oro para cubrir las grietas y unir las piezas de porcelanas rotas, así que se vuelven más hermosas y valiosas luego del proceso. Esta es una ambición demasiado grande para mí, no tengo el oro ni la destreza para hacerlo, solo tengo unos restos que no sé cómo manejar.
La soledad me ha golpeado recientemente, precisamente por lo narrado hasta aquí, así que mi única forma de liberarme es con estas letras. De todas formas, más temprano que tarde, todo s(m)e desborda, pues cada fractura es una fuga. Pero cuando hay demasiado adentro, el desbordamiento es más fuerte y me quiebra más (es cuestión de física), entonces, es mejor darle salida calmadamente.
Creo que nunca antes me había enfrentado tan evidentemente a la soledad, estoy viviendo otra experiencia de mí. A pesar de ser tan silenciosa, la soledad me aturde. Ahora todos mis pensamientos rebotan contra las paredes de mi encierro y cada vez los escucho más fuertemente. Intento distraerme, pero hay días en los que no funciona, como hoy. Su mensaje solo me habla de un dolor de existir y me enfrenta a verdades difíciles de asumir.
Soy desecho tóxico. I'm an empty carcass. I'm broken beyond repair.
En días como este, mi esperanza es solo una: Espero que mañana (yo) no sea como hoy.
Es difícil pensar en mí como una mala persona, me genera conflicto. Si pienso que soy una buena persona, me siento arrogante. Si pienso que soy una mala persona, siento que soy demasiado dura conmigo misma. Quiero dejar de ver la vida en blanco y negro, me cuesta tanto. Aunque, a ratos, lo logro (hoy no, pero otros días sí).
Otras veces, pienso que el concepto de bondad que yo tengo es erróneo. Yo encuentro cosas buenas y bellas en mí, pero son imperceptibles para los otros y las otras. Entonces, quizás realmente no son buenas. O puede que lo único bueno que quede en mí, de hecho, sea imperceptible para los demás, solo yo lo puedo ver. Tal vez es cuestión de aprender a comunicarlo. Tal vez no.
Llevo casi dos años intentando juntar las piezas, pero solo las rompo más. Son como trozos de una porcelana o una cerámica muy delicada, se necesita una experta que sepa restaurarlas. Definitivamente, yo no lo soy. Ha habido veces en las que he creído que estaba lográndolo, sin embargo, parece que solo me he roto más. Además, son pedazos muy filosos, por tanto, la tarea de reparar irremediablemente hiere a quienes lo intentan. En ocasiones pienso que esto no tiene arreglo, que solamente me seguiré desintegrando hasta volverme polvo y así, el viento me arrastrará y cesaré de existir.
Yo tenía en mente repararme como con esa técnica japonesa llamada kintsukuroi. En esta, se usa oro para cubrir las grietas y unir las piezas de porcelanas rotas, así que se vuelven más hermosas y valiosas luego del proceso. Esta es una ambición demasiado grande para mí, no tengo el oro ni la destreza para hacerlo, solo tengo unos restos que no sé cómo manejar.
La soledad me ha golpeado recientemente, precisamente por lo narrado hasta aquí, así que mi única forma de liberarme es con estas letras. De todas formas, más temprano que tarde, todo s(m)e desborda, pues cada fractura es una fuga. Pero cuando hay demasiado adentro, el desbordamiento es más fuerte y me quiebra más (es cuestión de física), entonces, es mejor darle salida calmadamente.
Creo que nunca antes me había enfrentado tan evidentemente a la soledad, estoy viviendo otra experiencia de mí. A pesar de ser tan silenciosa, la soledad me aturde. Ahora todos mis pensamientos rebotan contra las paredes de mi encierro y cada vez los escucho más fuertemente. Intento distraerme, pero hay días en los que no funciona, como hoy. Su mensaje solo me habla de un dolor de existir y me enfrenta a verdades difíciles de asumir.
Soy desecho tóxico. I'm an empty carcass. I'm broken beyond repair.
En días como este, mi esperanza es solo una: Espero que mañana (yo) no sea como hoy.